Las acusaciones siguen creciendo y cada vez son más las personas que se juntan para pedir basta. Mientras que la compañía parece hacer oídos sordos. (tema: PlayStation denuncias)
Siete exempleados y un empleado actual presentaron ante Sony una demanda colectiva en representación de ellos y de sus compañeros de trabajo. Específicamente, se trata de 8 mujeres, las cuales han profundizado en la gran cantidad de comentarios sexistas que recibieron. También mencionan un gran nivel de desprecio ante las ideas propuestas y falta de ascensos en ellas como en las demás compañeras.
Toda esta información, surgió gracias a que trabajadores con mucha antigüedad dieron su testimonio de manera incógnita. Entre los relatos se menciona las “sesiones de calibración”. Lo que se hacía en estas reuniones, era juntar a todo el personal que tuviera las capacidades para subir de puesto. El problema se encuentra en que, de todas las personas llamadas, alrededor de 70-80 eran hombres, mientras que 4-5 eran mujeres. Y creo que no hace falta mencionar que no fueron seleccionadas.
Las razones que utilizaban para justificar su no ascenso estaban relacionadas con sus vidas privadas o embarazos. Lo que no sorprende es que este tipo de planteos se le realizó al sector masculino. Pero esto ya había sido vaticinado. En noviembre del 2021 una ex analista de seguridad declaró que Sony no estaba preparada para poder afrontar situaciones en espacios de trabajo tóxicos. Además, de que muchas de sus empleadas dejaron sus puestos por estas razones.
¿Cómo reaccionó la compañía en su momento? Ante el pedido de la demanda colectiva, le pidió a la corte que la desestimará, estableciendo que todos los argumentos eran completamente falsos. Incluso, mencionó que eran incomprobables por falta de hechos verídicos.
La primer denuncia de género hacia PlayStation (tema: PlayStation denuncias)
La analista de seguridad mencionada anteriormente, se llama Emma Majo. Trabajaba desde 2015 siendo echada el año pasado luego de presentar a la empresa una carta por prejuicio de género. Desde Sony justifican esta acción con el cierre de un estudio interno. Sin embargo, Majo asegura no haber estado relacionada en ningún momento dentro de ese equipo. Además, la denunciante hace referencia que, a comparación de los hombres, las mujeres se ven perjudicadas en sus salarios.
“Sony discrimina a las empleadas, incluidas las mujeres y las que se identifican como mujeres, en compensaciones y ascensos y las somete a una cultura laboral predominante por hombres”, comentaba Emma Majo durante su acusación.
Por el momento, parece que la demanda colectiva comenzada por Majo está juntando cada vez más gente. Y si sigue a este ritmo, será muy complicado que la corte la rechace bajo el fundamento de la falta de pruebas. Los testimonios cada vez son más completos y todos siempre rondan en las mismas situaciones, personas, dichos y hechos.