La delantera estrella de la Selección Argentina de Fútbol, fue atacada en redes sociales desde el inició del Mundial de Fútbol Femenino de Australia y Nueva Zelanda. Entre los principales argumentos contra Yamila Rodríguez se encontraba su favoritismo sobre Cristiano Ronaldo y una pasada declaración a favor de Sebastián Villa.
Para contextualizar, durante las acusaciones y juicios del exjugador de Boca Juniors, Villa, la jugadora se mostró en defensa del mismo. Durante mucho tiempo fue constantemente criticada y atacada, siendo menospreciada por su condición de mujer. Y entre los comentarios también había personas que desprestigiaban la Liga de Fútbol Femenino de Argentina. Sin embargo, Rodríguez, al poco tiempo, salió a disculparse sobre sus dichos y opiniones al respecto.
En segundo lugar, Yamila Rodríguez nunca ocultó su fanatismo por el astro portugués, incluso posee un tatuaje en su pierna izquierda con la cara de Ronaldo. Empero, en las redes es constantemente caracterizada como “anti Messi” por su idolatría, más en la actualidad cuando la Selección Masculina de Fútbol se coronó campeón el pasado Mundial de Fútbol QATAR 2022.
Actualmente, la delantera se encuentra concentrando con la Selección Femenina para el próximo partido contra Sudáfrica. Y aunque muchas veces demostró que su forma de jugar es más grande que las críticas recibidas, sigue siendo una persona. Desgraciadamente, para ella, la situación la sobrepaso y tuvo que salir a dar aclaraciones sobre todo lo que se comenta de su persona.
El pedido de Yamila Rodríguez
“Por favor, basta; no la estoy pasando bien. ¿En qué momento dije que soy anti-Messi? Dejen de decir cosas que yo no dije por qué de verdad la estoy pasando mal (en medio de un Mundial representando al país). No la paso mal por ustedes sino por las barbaridades que se dicen, sin piedad. ¿Uno no puede tener un ídolo o un jugador que le guste? Por favor”, suplicaba la actual jugadora del Palmeiras.
“Jamás dije que era anti-Messi, jamás lo sería. Messi es nuestro gran capitán de la Selección, pero que yo diga que mi inspiración y mi ídolo es CR7 no quiere decir que odie a Messi, sino que a mí me gusta más otro jugador, el que me inspiró. ¿Cuál es el problema?. No estamos todos obligados solo a amar a los jugadores de nuestro país. Por favor entiendan que esto es fútbol y cada uno tiene sus preferencias. Destacar a uno no significa enterrar al otro. Basta, cansa, duele”, cerraba la jugadora en una historia en Instagram.
El “Anti Messismo al máximo”
En la actualidad, incluso mucho más desde que la Argentina obtuvo su tercera corona, todos defienden a Lionel Messi en todo lo que participe. El problema es que ha llegado a niveles tales que todos buscan protagonismo y apuntar a los demás si en algún momento se lo criticó, resaltando su supuesta “defensa incondicional” al astro argentino. Y sostengo las comillas, ya que muchos de los señaladores terminan siendo “carpeteados” y se publican textos criticando a Lionel Messi.
Pero el problema no es de las personas que criticaron a Messi, en realidad tenían hasta muchas razones para hacerlo. El enojo y cansancio colectivo que tuvo el pueblo argentino con el 10 era muy grande. Tanto redes sociales como medios de comunicación se encargaron de destrozarlo durante mucho tiempo. Las constantes comparaciones con Maradona de parte de los más grandes tampoco ayudaban y siempre se lo cuestiono por no ganar nada con la selección.
A lo que quiero llegar es que, Yamila Rodríguez también tuvo estas actitudes, pero no deja de ser persona o una gran jugadora por eso. Para muchos, las diferentes opiniones o los cambios de pensamientos no existen y los favoritismos se mantienen en extremos toda la vida. Y hoy por hoy hay gente que hizo lo mismo que Yamila, pero la atacan sin igual. Incluso, usuarios de redes sociales que atacaron a delantera, (como el twitero @fabrigol y el periodista Diego Borinsky) hicieron oídos sordos luego de la aclaración de la astro argentina. Esto revela que no es una simple cuestión de defender a Messi, sino que también el atacar a las jugadoras por ser mujeres. Al fin y al cabo termina demostrando un cierto odio hacia la competición femenina y desprecio de la jugadora por su simple diferencia de opiniones.
Escrito por Federico Galante
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