
Las negociaciones entre la Argentina y el FMI por la cuarta revisión del programa y por la flexibilización de las metas de reservas. Esto hará que permita gatillar US$ 5.400 millones durante el corriente mes de marzo. Se desarrollan de manera positiva y el anuncio del mismo se podría concretar el lunes. De esta forma, la Argentina logró flexibilizar las metas de reservas del programa. Esto en base a un esquema de cálculo móvil, que variará según la evolución de las exportaciones del país. (FMI lunes)
Hasta hoy sábado, se estaba cerrando el programa de metas de reservas del año con supuestos de caída o aumento de exportaciones. En ese marco, confían en poder anunciarlo el lunes, dijo a Télam una fuente con conocimiento. El ministro de Economía, Sergio Massa, señaló días atrás que se había llegado a un acuerdo con el FMI para flexibilizar. Además, volver “realistas” algunas de las metas establecidas en el programa, a raíz de la sequía en el país y los costos de la guerra en Ucrania, y garantizar así los desembolsos de más de US$ 19.000 millones para hacer frente a los vencimientos de la deuda con el organismo programados para este año.
“El consenso con el FMI es que es mejor adecuar la programación del trabajo del año desde el inicio para dar previsibilidad y no tener que hacer waivers (pedidos de perdón) durante el año”, dijo Massa el sábado pasado tras la reunión con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en la India, donde participó de una reunión del G20. El titular del Palacio de Hacienda subrayó que el objetivo entre ambas partes “es ser realistas y previsibles para que el programa sea de verdad un ordenador y no un papel en el aire que no se cumple”.
Asimismo, recordó que los objetivos del programa con el Fondo son “el orden fiscal, la acumulación de reservas y la programación monetaria ordenada”. En su reunión con Georgieva en el marco de la cumbre del G20, el funcionario presentó un informe que sostiene que el conflicto ocasionó un efecto negativo de US$ 4.940 millones en la balanza comercial de la Argentina, ante la suba de los precios internacionales de los combustibles y el fuerte incremento del costo de los fletes para exportación, fundamentalmente.
“La guerra y la sequía juegan un papel en nuestra economía y es mejor afrontarlo poniendo objetivos alcanzables para no estar corrigiendo cada trimestre”, agregó el ministro en el comunicado de hoy. Hasta ahora, el país tenía previsto en el acuerdo una reducción del déficit fiscal primario del 2,5% del Producto Bruto Interno (PBI) en 2022 al 1,9% para este año, y una disminución de la asistencia financiera del Banco Central (BCRA) al Tesoro de 1% a 0,6%.
El período se que encuentra bajo análisis es el cuarto trimestre de 2022, año que la Argentina cerró con un déficit primario (sin incluir los servicios de deuda) equivalente al 2,4% del Producto Bruto Interno (PBI), con un sobrecumplimiento de una décima, ya que la meta acordada fue del 2,5%, tal como informó el Gobierno en enero último.