
El gobierno de Javier Milei avanza con su plan de reforma estatal y eliminó la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC), organismo encargado de gestionar, fiscalizar y controlar armas, municiones y explosivos en Argentina.
La decisión fue oficializada este martes mediante el Decreto 445/2025, publicado en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.
La medida llega apenas días después de que el Ejecutivo flexibilizara por decreto el acceso a armas semiautomáticas alimentadas con cargadores removibles, similares a fusiles, carabinas o subametralladoras de asalto derivadas de armamento militar.
Hasta este martes, la ANMAC funcionaba como organismo descentralizado bajo la órbita del Ministerio de Seguridad y con autonomía económica y financiera. A partir de ahora, pasará a ser un organismo desconcentrado, es decir, bajo control directo de la cartera que lidera Patricia Bullrich.
El decreto establece que la nueva estructura conservará la especialidad técnica y las funciones tradicionales asignadas a la gestión y regulación de materiales controlados, aunque sin mantener su estructura anterior ni su autonomía presupuestaria.
Con la eliminación de la ANMAC, también se disolvió el Fondo de Promoción de las Políticas de Prevención de la Violencia Armada (FPVA). Este fondo financiaba programas destinados a reducir la circulación de armas y prevenir situaciones de violencia con armas de fuego.
Para asumir las funciones de la desaparecida ANMAC, el Gobierno decidió restablecer el Registro Nacional de Armas (RENAR), que operará como organismo desconcentrado bajo el Ministerio de Seguridad Nacional.
Según el decreto, el RENAR tendrá como objetivos principales la aplicación, control y fiscalización de la Ley Nacional de Armas y Explosivos N° 20.429 y sus normas complementarias. También deberá cooperar en la formulación de políticas criminales y promover acciones de prevención de la violencia armada.
Además, el texto oficial aclara que todo el personal actual de la ANMAC conservará sus cargos, al menos hasta que se defina la nueva estructura organizativa dentro del Ministerio de Seguridad.
La eliminación de la ANMAC se da en un contexto de flexibilización del acceso a armamento semiautomático. Semanas atrás, el Gobierno derogó el Decreto 64/1995, que por más de 30 años prohibió a los civiles la tenencia de armas de guerra, salvo en casos excepcionales autorizados por Defensa.
Mediante un nuevo decreto, la administración de Javier Milei habilitó a los legítimos usuarios a adquirir y portar armas semiautomáticas con cargadores de quita y pon, similares a armamento militar, siempre que cumplan un régimen especial de control.
“Establécese un régimen de autorización especial para los actos de adquisición y tenencia de armas semiautomáticas alimentadas con cargadores de quita y pon símil fusiles, carabinas o subametralladoras de asalto derivadas de armas de uso militar de calibre superior al .22 LR, peticionados por los legítimos usuarios de armas de fuego. La ANMAC tendrá a su cargo la aplicación del régimen de control especial”, señala el decreto presidencial.
El texto también habilita que estos materiales controlados puedan utilizarse en actividades deportivas u otras finalidades lícitas, ampliando las condiciones de acceso al armamento.
Con estas medidas, el Gobierno avanza en una reforma estructural del sistema de control de armas en Argentina, mientras los debates sobre seguridad, desarme civil y violencia armada vuelven a ocupar el centro de la escena pública.