La vicepresidente Victoria Villarruel optó por no convocar a la Comisión de Labor Parlamentaria ni llamar a sesión para este jueves, el último día del período ordinario. Con esta decisión, el kirchnerismo no podrá avanzar con el tratamiento del DNU que habilitó al Ministerio de Economía a renegociar la deuda pública. La última actividad en el Senado fue la presentación del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, realizada hoy.
Esta postura busca evitar un escenario de confrontación política. Según fuentes cercanas a la vicepresidente, la intención fue dar por cerrado el período ordinario sin abrir la posibilidad de que el kirchnerismo impulse el rechazo del DNU u otros temas complejos para el Gobierno. Unión por la Patria, con 33 votos, está a solo cuatro de alcanzar la mayoría, como lo demostró en sesiones pasadas al rechazar decretos clave del Ejecutivo.
Desde el entorno de Villarruel señalaron que la decisión responde a evitar sorpresas antes de fin de año. “Ante la mínima posibilidad de que el kirchnerismo pueda conseguir los votos para rechazar otro DNU, se resolvió que no haya Labor ni sesión”, explicaron fuentes parlamentarias.
A pesar de que hubo negociaciones entre sectores dialoguistas y La Libertad Avanza para tratar temas consensuados en la última sesión, la insistencia de Unión por la Patria en debatir el rechazo al DNU llevó a clausurar la actividad con la exposición de Francos como cierre del año legislativo.
Esta decisión se da en un contexto de distensión dentro de La Libertad Avanza. Los sectores más duros del espacio moderaron sus críticas hacia Villarruel tras las declaraciones de Javier Milei, quien expuso diferencias con la vicepresidente: “Villarruel no tiene ningún tipo de injerencia en la toma de decisiones. No participa de las reuniones de Gabinete. Decidió no participar. Hace mucho tiempo que decide no participar en las reuniones de Gabinete. Ella en su visión, en muchas de las cosas que nosotros hacemos está más cerca del círculo rojo, de lo que ella llama la alta política, y lo que nosotros llamamos la casta”, afirmó Milei, generando un fuerte impacto político.
A pesar de rumores iniciales sobre una posible aclaración pública de Villarruel, la vicepresidente optó por mantener un perfil bajo durante la semana. En redes sociales, respondió con ironía a un comentario que utiliz aba el término “Bichacruel”, acuñado por la diputada Lilia Lemoine: “Debo decir que me da mucha gracia que me llamen así. Es un sobrenombre épico, lástima que se le ocurrió a los K, pero me genera una sonrisa”.