

El Partido Justicialista (PJ) transita una semana decisiva en medio del inminente reacomodamiento del Congreso a partir del 10 de diciembre, fecha en la que el Gobierno prevé impulsar una nueva serie de reformas laborales, tributarias y económicas, y con este escenario de fondo, el peronismo encara dos reuniones claves en la sede partidaria para reorganizar su estrategia y afrontar el próximo período legislativo, marcado por cambios en la composición de ambas Cámaras y tensiones internas.
La primera cita está prevista para este martes a las 18 en la tradicional sede de Matheu 139. Allí sesionará el Consejo Nacional del PJ junto a sus secretarías y diversos invitados especiales con el objetivo de definir una “estrategia común” frente a los proyectos que el Gobierno de Javier Milei buscará instalar durante las sesiones extraordinarias, entre ellos la reforma laboral, la reforma tributaria y el Presupuesto 2026. Este encuentro aparece como una instancia necesaria para ordenar posiciones luego de un ciclo electoral que dejó señales de desgaste y dispersión dentro del espacio.
En lo legislativo, los bloques del peronismo deberán adaptarse a los recambios de bancas y a nuevas fugas, un fenómeno que complejiza la correlación de fuerzas. La posibilidad de reorganizar interbloques aparece como una alternativa para contener tensiones, aunque aún no existe una resolución definitiva al respecto.
En paralelo, el espacio que preside Cristina Fernández de Kirchner reconoce que la consigna de “frenar a Milei” no será suficiente como eje ordenador, tal como demostraron las elecciones. La falta de propuestas concretas fue una de las principales críticas internas, por lo que el PJ busca avanzar hacia definiciones programáticas que puedan ofrecerle a la sociedad una salida ante lo que consideran una inminente “cuarta crisis de deuda”.
La Cámara Alta es especialmente sensible por su vínculo directo con los gobernadores. Actualmente, el bloque peronista se encuentra dividido en tres sectores, aunque articula como interbloque. Las divisiones se originaron en 2022 durante el debate por el Consejo de la Magistratura, en una maniobra destinada a conservar un lugar como primera minoría, y se profundizaron este año con la creación del interbloque Convicción Federal por parte de cinco senadores.
A modo de anticipo de las discusiones de esta semana, la titular del PJ informó que recibió a un grupo de economistas que elaboró “propuestas sobre un modelo económico nacional de crecimiento productivo y federal para el siglo XXI”. Según expresó en redes sociales: “En el Día del Militante, recibimos en San José 1111 a un grupo de economistas que en representación de más de 80 profesionales me entregaron y presentaron consideraciones y propuestas sobre un modelo económico nacional de crecimiento productivo y federal para el siglo XXI”.
Fernández de Kirchner destacó que el trabajo fue realizado “en el ámbito del Partido Justicialista, divididos en comisiones y durante más de 45 jornadas de trabajo; elaboraron un documento económico de más de 400 páginas”. Además, aclaró que “no es un trabajo cerrado, sino una hoja de ruta abierta al debate y a la acción que será presentado ante el Partido Justicialista para su apertura y discusión”.
La expresidenta planteó que “Argentina enfrenta una encrucijada histórica”, atravesada por tensiones geopolíticas, transformaciones tecnológicas y desafíos energéticos y ambientales. “En este contexto urge abandonar la macroeconomía del desacuerdo y construir una hoja de ruta hacia el desarrollo con soberanía, producción e inclusión”, afirmó. Finalmente, concluyó: “Por eso creo sinceramente que es hora de decidir qué país queremos construir; porque la crisis argentina no es solo económica… es una crisis de proyecto de país”.