¿Qué es el Juicio Político y en qué situación está hoy Milei?

Escrito por: Desde Matanza | Publicado: 8 de Mayo de 2024

Qué es Juicio Político y situación está Milei

 

Hace unos pocos días un pedido de Juicio Político ingresó por vía legal al Poder Legislativo. El legajo de 25 páginas estuvo firmado por figuras importantes desde Atilio Borón. Dora Barrancos, Taty Almeida o el ganador del Premio Nobel de la Paz Perez Esquivel; en cual se demandaba al Presidente de la Cámara de Diputados Martín Menem a iniciar el proceso por “mal desempeño en funciones” del Presidente Milei. 

 

Ahora bien… ¿Qué es exactamente el proceso de Juicio Político, dónde y cuándo se aplicó?

 

El Juicio Político como mecanismo para una salida interrumpida del Poder

 

La Constitución Argentina establece entre los Artículos 59-60 que “Ninguno será declarado culpable sino a mayoría de los dos tercios de los miembros presentes.” Esto significa que el Congreso puede proceder a remover a la figura presidencial (así como a otros cargos del Ejecutivo tales como Ministros, Secretarios, etc.), sí y sólo sí ⅔ partes de las 2 Cámaras votan a favor del impeachment

El Juicio Político no es un proceso de término del Poder Judicial, sino que es meramente de carácter político y la continuidad de los Presidentes está supeditada a la necesidad de contar con una cantidad mínima de legisladores (⅓ de cada Cámara) para votar en contra de la remoción. Sin embargo hay que aclarar en este punto: el proceso de Juicio Político es perfectamente legal. A esto incluído en la Constitución y no tiene el carácter bajo ningún punto de vista de Golpe de Estado.

 

Los casos recientes de Juicio Político en Latinoamérica 

 

Si bien todos los países tienen sus propias constituciones, en la mayor parte de los países con régimen presidencialista se incluye la regla de Juicio Político con los votos de los ⅔ de las Cámaras. En Paraguay en el 2012 se concretó un impeachment, al configurar esta difícil mayoría especial, removiendo al Presidente Lugo, débil parlamentariamente y muy enfrentado a los Partidos Políticos tradicionales que dominan la política paraguaya. 

 

Un caso muy parecido, y bastante recordado, fue la remoción de Dilma Rousseff de la Presidencia del Brasil en el 2016. En cual se inició a partir de rupturas dentro de la coalición de Gobierno, con la figura clave del Vicepresidente Temer acusandola de ser incompetente. Al pasar la Comisión de Juicio Político controlada por Temer el proceso; la votación en la Cámara se realizó con mayoría simple y removió a Dilma de inmediato, empoderando al Vicepresidente en la silla presidencial.

 

¿Y ahora qué pasa?

 

El Juicio Político a Milei está, hoy por hoy, lejos de llevarse a cabo. La clave de estos procesos es analizar a los actores dentro del Congreso y ver si está la posibilidad o no de llegar a los ⅔ de las Cámaras para aprobar el impeachment. Debido a que existe una oposición dialoguista que controla su tercio de los votos, Milei no cuenta con un peligro real de remoción a pesar de tener un escudo legislativo generado a partir de su alianza con Cambiemos. 

 

Argentina nunca tuvo un proceso de remoción vía Juicio Político que se concretara, tampoco tiene a una oposición dura que tenga la fuerza suficiente ni la capacidad de coalición para convencer (aún) a la dialoguista de apoyar este mecanismo, ni tampoco existe un liderazgo que asome dentro de la Libertad Avanza que lo pueda reemplazar. En otras palabras, existe un temor por parte de la oposición liviana de que esto puede beneficiar las chances electorales de la oposición dura.

 

Uno de los factores principales para entender esta herramienta es que no siempre es relevante, pero siempre es opción en caso de ser necesario. Mientras que el proceso de remoción constitucional vía Juicio Político puede ser una válvula de escape para dar por finalizado anticipadamente a un Gobierno fallido, también es conlleva los peligros de reiteración (como sucede reccurentemente desde hace ya 23 años en Perú), así también como violar un pacto electoral en el cual se saca un Presidente votado. Para dar tranquilidad, este segundo punto no está probado en la práctica y todo proceso inicia con un escándalo y ruptura del Gobierno desde arriba, así también con una oposición cerrada a la negociación para la supervivencia.

 

Escrito por Emiliano González Lavado

Más notas en Política

COMPARTIR