
En el conurbano, la música es más que melodías y ritmos. Los artistas convierten sus obras en medios de comunicación, para la identificación, la reivindicación y la lucha. Cada canción es una declaración de principios, es un vehículo de mensajes sociales y políticos. Los músicos tienen una gran responsabilidad, pues saben que sus letras tienen que decir algo. música feminista
Desde Matanza entrevistó a la cantante de Morón Paula Andrea, miembro de la banda de cumbia disidente Tita Print. Sus creaciones están empapadas por el feminismo, y se tratan, así, de armas para el combate por la visibilización, la igualdad y la justicia. “Todo lo que sea lucha y música van de la mano”, aseguró Paula durante la conversación.
Paula Andrea se presenta como música. Ella estudió en la escuela de Ramos Mejía Leopoldo Marechal. Allí, se formó como profesora de canto de jazz, de guitarra y de piano. Desde muy joven, quiso dedicarse al arte. Ya a los 5 años de edad, cuenta, “había arrancado con ganas de empezar a tocar la guitarra”. Por eso, su papá le consiguió una, pero la anotó a clases de piano, recuerda entre risas la cantante. música feminista
Luego de unos años alejada de la música, su interés por la guitarra renació, más fuerte que nunca. Así, con 16 años, descubrió: “me empezó a interesar, dije ‘claramente esto me interesa un montón, quiere volver a tener contacto’”. Finalmente, pudo anotarse para tomar clases de guitarra, con su profesor Gabriel, de la banda del oeste Guillermina. En ese momento, comenzó su ininterrumpida carrera, tocando en diferentes bandas. En algunas de ellas, también, acompañando a su papá.
“Estuvo bueno compartir la música con mi papá, es un lindo lugar de encuentro”, reconoce Paula al hablar de las bandas que compartió con su padre. Además, recuerda cómo su amor por la música nació gracias a él. “Él silbaba mucho, y yo también”, explica. Agrega: “a los 4 años, ese fue mi primer instrumento, no hablaba, pero silbaba”.
Para trabajar con la música, afirma Paula, se necesita “amor, mucha paciencia, mucha perseverancia, mucha constancia”. Ella está realmente agradecida por la posibilidad que tuvo de estudiar profesionalmente y dedicarse, de manera ininterrumpida, a su pasión. Aun así, reconoce que es “muy difícil”. Los obstáculos son muchos, y a veces son muy difíciles de sortear.
A ello, agrega algo más: “hay una cuestión de género también muy marcada”. Profundiza en este tema: “muchos hombres estudiando música, arriba del escenario, dando clases, entonces, a la mujer le cuesta un poquito más”. A las mujeres, “y a las disidencias”, agrega. “Así como hay diferencias en los puestos musicales, también pasa en la música”, refuerza Paula.
Cuando tomó consciencia de esta situación, Paula comprendió que su rol como música implicaba muchas más responsabilidades de las que creía. “Ahí, empecé a tomarlo en serio. Yo también puedo tocar arriba del escenario, pero dar clases, y no sólo de canto”, asevera. “Siempre decimos que no hay mujeres arriba del escenario ni disidencias visibles, entonces, yo tengo que hacerme cargo de ocupar esos espacios”, reflexiona sobre su rol como mujer en la música. “Me sentí responsable de hacerme cargo de mi rol y ocupar los espacios”, concluye.
Un paso importante en la carrera de Paula fue su ingreso como bajista a la banda de cumbia Tita Print. “Me pareció muy piola la música que hacía, era tremendo”, afirma. A ella siempre le encantó la cumbia, cuenta, pero hubo algo especial en la música de Tita Print: “Tita hace cumbia disidente”. “Disidente, porque tienen letras muy combativas, donde visibiliza personas trans, lesbianas, y la mujer y disidencias tomando fuerza”, desarrolla. Además, la banda está formada por mujeres y disidencias. Por eso, fue el cambio que Paula estaba necesitando: “estar tocando con mujeres y disidencias, después de tocar tantos años sólo con hombres, era hermoso”.
Paula cuenta sobre el EP que lanzó Tinta Print, con 6 canciones nuevas. Participaron en este proyecto muchos invitados de lujo. Menciona a la cantante de tango Juli Laso, a la rapera guatemaltense Rebeca Lane e incluso a Miss Bolivia, que intervino como productora del tema “Látigo”. “Esas letras hablan de violencias, de abuso, de todo eso que no queremos hablar, y está puesto en cumbia en una mezcla hermosa”, reafirma la bajista.
Hacer música como la de Tita Print, además, es posible gracias a un entorno que ofrece oportunidades, como el conurbano. “En el Oeste está el agite”, cita Paula al refrán conocido en esta zona. “Eso menciona que hay una movida, están las noches, hay casas culturales, hay movidas culturales que dan muchas posibilidades”, asegura.
Para concluir, Paula explica qué es la música para ella. “La música es un lugar donde uno expresa mucho”, comienza. Concluye: “y una de las cosas que más quiero es que la gente pueda escuchar una canción y sentirse identificada, que le pasen cosas”. La música puede compartir historias, y, a través de ella, se puede “hablar de temas que en otros momentos es difícil hablar”. En otras palabras, explica, puede haber letras “bonitas y amorosas”, pero también “letras combativas, porque todo lo que sea lucha y música van de la mano”.
Finalmente, Paula invita a seguir a Tita Print en Instagram, YouTube y Spotify para conocer de qué se trata, y no perderse sus próximas presentaciones. También invita a las personas interesadas en su música y en sus clases de canto e instrumento a seguirla en Instagram en @paulanadrea.musica . Además, adelanta que está preparada para lanzar sus propias composiciones, esas que tiene guardadas desde hace mucho, y que nunca se había animado a mostrar. Para no perdérselas, y escuchar todo lo que tiene para contar, podés seguirla en su cuenta de Instagram.
Escrito por Julián Dante