
El Gobierno nacional realizó más de 100 despidos de trabajadores del Hospital Posadas al argumentar que no cumplían sus tareas y que, en muchos casos, ni siquiera asistían a sus puestos. La medida fue comunicada en medio del reclamo salarial que mantiene en alerta al personal de salud, quienes denuncian la falta de convocatoria por parte del Ministerio de Salud para abrir una instancia formal de negociación.
Los trabajadores del Hospital Posadas consideran que los despidos son una forma de disciplinamiento ante la protesta y advierten que seguirán organizando medidas de fuerza. Desde el sindicato sostienen que las cesantías son arbitrarias y que varios de los despedidos cumplían funciones esenciales dentro del hospital.
En paralelo, el conflicto también se intensificó en el Hospital Garrahan, donde este martes hubo una masiva movilización de trabajadores. Aunque el Gobierno anunció un bono de 300 mil pesos para los médicos residentes, el beneficio no será incorporado al salario y se pagará por fuera del recibo de sueldo, sin impacto en aportes ni aguinaldo.
Además, no hubo ninguna propuesta para el personal de planta permanente, lo que profundizó el malestar entre los distintos sectores del hospital. Las y los trabajadores del Garrahan insisten en que el conflicto no está cerrado y exigen una respuesta integral que contemple mejoras para toda la plantilla.
Frente a esta situación, el Ministerio de Salud pidió al Ministerio de Trabajo el levantamiento de la conciliación obligatoria en el Garrahan. Según la cartera sanitaria, ATE habría incurrido en un “incumplimiento deliberado” de la medida. Por ese motivo, se anunció también que se descontará el día a quienes participaron del paro convocado durante la jornada del martes.
La tensión entre el Gobierno y los gremios del sector salud sigue en aumento, y sin señales de resolución a corto plazo.