Por qué la atmósfera de la ciudad de Halo 3 ODST es perfecta

Un poco de Jazz, temáticas poderosas y una dirección cohesiva son algunas de las razones principales.

Escrito por: Ignacio Magnacco | Publicado: 19 de Septiembre de 2022

Halo 3 ODST

Un poco de Jazz, temáticas poderosas y una dirección cohesiva son algunas de las razones principales. ( Halo 3 ODST )

¿Qué es la perfecta atmósfera? Mientras que esta es una pregunta sumamente subjetiva, considero que es aquello que nos brinda sensaciones y sentimientos que más se acercan a los propósitos de la obra y de los artistas detrás de ella, sea a través de su guion, diálogo, pero más frecuentemente, su presentación.

Existen muchos ejemplos en lo que esto no funciona, principalmente porque las distintas piezas funcionan más en distintas partes como en armonía, generando así sentimientos conflictivos.

Y mientras que es cierto que frecuentemente una sólida atmósfera se suele pasar por alto en el ojo público, se muestran cada tanto ejemplos tan fascinantes que nos hacen pensar “qué fue eso?”, y es en este caso que las secuencias de Nueva Mombasa de Halo 3 ODST triunfan sobre mucho del medio e incluso en la cultura popular

Sé que, sobre todo para aquellos más escépticos de los videojuegos, esto sonará hiperbólico, pero esta secuencia del spin-off del Jefe Maestro, y por extensión, el catálogo de Bungie, demuestra por qué este estudio fue uno de los grandes del World-Building, presentación, espectáculo, y belleza.

Una humanidad nunca antes sentida

A diferencia del resto de títulos de la saga, ODST no te pone en control del Jefe Maestro, o de un Spartan (soldados cyborgs como el anterior), o incluso del Inquisidor. No, en vez de esto, controlamos a un grupo de ODST (Orbital Drop Shock Troopers).

Estos forman parte un grupo élite de soldados, pero que ciertamente no poseen las actitudes físicas o resistentes de un Spartan, y por primera vez en la saga somos capaces de contemplar la urgencia de esto. Ya no somos el héroe inbatible y legendario verde, sino parte de un escuadrón experto en una misión sumamente peligrosa, en la que serás forzado a cooperar con tus compañeros para sobrevivir.

Y qué mejor setting que las calles de Nueva Mombasa, ciudad donde se libró la épica batalla entre el jefe Maestro y el Covenant en Halo 2. Excepto que ODST comienza inmediatamente después, con vos contemplando los restos, destrucción, y silencio ensordecedor de la aparente conclusión.

Inmediatamente en sus sinopsis, ODST tiene los ingredientes para formar una atmósfera que no podría diferir más de sus predecesores o contemporáneos. Una que, en vez de proporcionar los sentimientos de empoderamiento y grandiosidad del jefe Maestro, ofrece una combinación fascinante entre amenazante, misteriosa, algo espeluznante, desoladora, pero absolutamente hermosa.

Es aun más notable si venimos de jugar a la segunda entrega de la saga, en la que nuestro anterior protagonista se subió a taques para destruir al Covenant, o hizo explotar a un Scarba por dentro al subirse a él. Y, luego, con ODST, no vemos más que la evidencia y rastros de una guerra inconclusa, una que dejó fuerzas enemigas al planeta, pero no al Spartan que los destruyó.

Traigan el Jazz

En varias entrevistas, el compositor de la saga durante la estadía de Bungie, Martin O´Donell, aclaró que, a pesar de ser más conocido y aclamado por sus composiciones musicales, su posición se extendió a la de director de audio. Y mientras es fácil ignorar los otros elementos del lado auditivo, cuando todos se presentan con orgullo frontalmente, demuestran la importancia de esta aclaración.

Al poner nuestros pies en la tierra, escuchamos los respiros intensos de nuestro soldado, el “novato”, agregado a ocasionales alarmas de autos, comunicados distantes y una banda sonora que pregunta “¿Donde estoy? ¿Y qué pasó acá?” con el tema “The Rookie”.

https://www.youtube.com/watch?v=6qTpwMlqeLU

No obstante, conforme avanza incorpora más elementos leit motiv de la saga, significando que debemos continuar con nuestra misión y averiguar qué sucedió con nuestro equipo. Y es luego de que recuperamos fragmentos de las batallas de ellos que nuestro protagonista mudo reflexiona sobre lo sucedido y mira los efectos de las batallas.

Y es en estos momentos que O´ Donell ofrece algunas de sus piezas más majestuosas de su carrera, sea con la atmósfera de incertidumbre y melancolía con el simple piano de “Neon Night”, o el cautivante saxofón en “Deference of Darkness”. 

 

Son estos aspectos de la presentación que hacen que Halo 3 ODST siga siendo recordado. Incluso si solo compone de elementos de breves descanso entre las grandes batallas. Brinda una sensación de humanidad, fragilidad y fascinación como nunca visto antes o desde entonces.

Oh cierto, esto era un videojuego

Siempre vale recordar que al fin y al cabo este sigue siendo un medio interactivo. Por ende, por tantas fortalezas que pueda poseer la narrativa, setting y presentación. Esto puede hacerse pedazos de no poseer una jugabilidad que refuerce estos elementos.

Y a pesar de que ODST no reinventa la rueda o revoluciona la saga en este aspecto. Sí pone su grano de arena para meterte más en su mundo. Contrario a los dichos de 343 con Halo Infinite. Técnicamente Bungie fue el primero en implementar una clase de mundo abierto con ODST, aunque con un asterisco.

A diferencia del último capítulo del Jefe Maestro, la exploración de ODST carece muchos de los tropos y actividades extra que esperamos con este tipo de mecánica. No tenemos realmente misiones secundarias, solo podemos coleccionar grabaciones de audio. Además, solo tenemos ocasionales tiroteos con el Covenant en la ciudad de Nueva Mombasa.

Entonces, ¿por qué lo pusieron? Bueno, si los desviamos estrictamente de como funciona como mundo abierto, el propósito de Bungie viene por ponernos en el control de la incertidumbre de nuestro protagonista. Esto porque, mientras tenemos cierta linealidad, la exploración nos deja elegir cualquier misión en orden aleatorio. Lo cual también temáticamente se vincula con que somos un soldado regular sin órdenes que nos coordinen.

También que, por lo general las batallas previas de nuestros compañeros se hayan librado en las calles que exploramos ahora nos ayuda a dar una nueva perspectiva en el piso que estamos caminando.

Además, cabe mencionar la mecánica del visor, que nos da iluminación acorde para que podamos ver claramente lo que nos rodea. Menciono esto porque nos da una perspectiva poco acorde a lo que sucede. Al apagarlo, no vemos más que oscuridad total, solo obstaculizada por ocasionales luces de carteleras, o los fuegos de autos destruidos

El mundo abierto no es necesariamente una gran mecánica hablando en términos jugables. Hay una buena cantidad de espacio muerto y no innova tanto como se espera, pero para una expansión independiente de Halo 3, impresiona.

Conclusión

No quiero que se malinterprete, Halo 3 ODST no es mi juego preferido de Halo. De hecho tengo mis problemas con él, sea que sus mecánicas no explotan al máximo las diferencias entre un soldado normal y un Spartan. Su duración breve, la falta de verdadero peligro de sus protagonistas, o ciertas decisiones de diseño.

No obstante, no puedo negar sus espectaculares esfuerzos en venderte la atmósfera de una ciudad luego de una gran guerra. Además, es en estos breves pero importantes momentos que Halo 3 ODST te vende en sus intentos ambiciosos. Es buena parte de la razón por la que sigue siendo recordado con cariño. A pesar de, en su momento, ser visto con desdén por su contenido reducido.

Escrito por  Ignacio Magnacco
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