La llaman una comedia romántica, y están completamente en lo cierto. Una de las tramas recurrentes de esta película es Venom queriendo usar el alias “protector letal”. Si eso no establece el tono de “Venom: Let There be Carnage” no se preocupen, porque muchos más elementos lo harán. Venom Let There Be Carnage reseña
Esta, por supuesto, es una secuela del éxito comercial de 2018, filme que recibió críticas duras, pero tuvo un seguimiento de culto y fue considerada entretenida para la audiencia casual. Mientras que puedo acordar con la última, Venom terminó siendo un filme inconsistente, ambos en su tono y ritmo.
A diferencia de lo que indicó el marketing y las primeras impresiones, la obra de Ruben Fleischer terminó teniendo muchísimos momentos más humorísticos y ligeros de tono, comparado con la película edgy, oscura y antihéroe que nos intentaron vender.
No obstante, los efectos visuales fueron decentes, la actuación de Tom Hardy era muy buena, la dinámica entre Eddie y Venom era entretenida y la acción tuvo sus momentos brillantes, incluso si se vio muy limitada por su clasificación para mayores de 13. Venom no me pareció una película terrible o incluso muy mala, tiene bastantes fallos, pero termina siendo una obra entretenida, ciertamente diferente del resto, incluso si técnicamente no de lo más sólida.
Una de las quejas más prominentes de la primera película (aparte de la omisión de Spider-Man y el rating PG-13) fue la decisión de utilizar el villano Riot (uno poco popular del lore) en vez del más icónico, Carnage.
Bueno, para eso está este filme. Así es, en la escena post-créditos de Venom tuvimos una primera mirada a la interpretación de Woody Harrelson del asesino serial pelirrojo y, más allá de que su peluca era ridícula y memeable, tenía potencial.
Y por suerte, puedo decir que Harrelson ofrece una buena actuación a su papel, al menos con el guion dado. Tiene un tono bajo en su voz, pero a la vez amenazante. Además, sobre todo comparado con Carlton Drake, el filme nos enseñas más de él, e intentan que simpatices con su pasado, aunque con resultados no tan sólidos. Además, del lado de acción, definitivamente tenemos más presencia del simbionte rojo, con 3 escenas que demuestran el poder brutal y visceral del personaje.
Sin embargo, el lado sentimental es uno en el que no llega a sus metas. Intentan que te sientas mal por él por su pasado descrito, pero debido a que se entrega vía exposición, se siente un poco forzado. Y mientras que su dinámica con Shriek tiene más profundidad, no llega mucho al punto de que te sientas preocupado por algo que les pueda ocurrir.
Además, el filme trata de trazarnos un tipo de conexión entre el villano y el protagonista, pero se percibe como apresurado y hecho a medias. Es conceptualmente intrigante, y hay escenas buenas de por sí, pero me pregunto si la duración de hora y media forzó que este filme tenga menos tiempo para respirar con estas escenas.
La dinámica entre Brock y Venom fue generalmente querida por la audiencia e incluso algunos de los críticos, por lo que su secuela redobla este aspecto y con mucha fuerza. Mucho del filme está enfocado en su química y problemas de relaciones. Y sí, es tan ridículo como suena, pero hay cierto encanto y pasión en ello que lo vuelve entretenido y hasta un poco sentimental.
Esto también nos trae varios momentos humorísticos derivados de sus simples interacciones, más gracioso si recordamos que, esencialmente, es Tom Hardy hablando consigo mismo. Sin duda su actuación es muy buena acá, mejor que la primera, y podés ver que la está pasando muy bien en su rol.
Desafortunadamente, no vemos casi nada de acción de parte de nuestro héroe, solo la batalla final. Esto es decepcionante, pero viene debido a una decisión en concentrarse en la dinámica de sus protagonistas, aspecto en el que hizo un trabajo más que decente.
Los personajes secundarios entran en este punto medio incómodo en el que tienen el suficiente tiempo para recordar que estaban en el filme, pero a la vez no lo suficiente para que nos conectemos con ellos o que se nos hagan muy entretenido.
Por ejemplo, tenemos a Anne y Dan de la primera película. Siguen con la misma narrativa de Eddie tratando de volver con su ex a pesar de que ella lo superó, pero realmente no va a ningún lado y se sienten innecesarios, aunque sí puedo decir que hacen más que en la primera y tienen sus momentos breves.
También hay un personaje policía que tiene menos personalidad, salvo una historia pasada con Shriek (quien también no es mucho más que básica y tener un poder interesante).
Del lado de presentación, Venom 2 es decente pero no llega a grandeza. Mientras que los diseños visulaes de los simbiontes son excelentes, y me encanta como se ve Carnage, las imágenes generadas por computadoras que los acompañan no son las mejores.
En vez de ir por una dirección creíble, van a fondo con el uso de CG, lo que provoca que ciertas escenas se sientan un poco falsas. No propongo que la película no tenga CGI. Solo digo que la forma que se presenta acá se siente un poco más como una animación 3D en vez de tratar de combinarse con la realidad. Un buen ejemplo del último es como se implementó el simbionte visualmente en Spider-Man 3
Aun así, insisto, no es malo, o incluso necesariamente peor, más una cuestión de preferencia personal. Se puede decir que le pusieron mucho esfuerzo en este apartado, al coste de que algunas partes menores se vean un poco falsas. Esto se complementa de una banda sonora que es perfectamente ok. No sobresale en particular, pero me gustó la inclusión de guitarras y género de Rock y Metal para distinguir a Carnage de Venom. Honestamente, lo que más destacó en este aparatado es la canción de créditos, “Last One Standing”. La lírica es lejos de ser sutil, pero tiene una muy linda melodía y las barras de los raperos incluidos son generalmente sólidas, lo cual lo vuelve mejor tema oficial que “Venom” de la primera película.
Queda claro que esta película se toma menos en serio que la primera y es más consistente. Con eso dicho, el humor es bastante decente. Nunca me hizo reír tanto, pero tuvo bastantes momentos un poco graciosos repartidos. Es generalmente exitosa en esta área, pero nunca sobresale mucho, y hubo algunas partes en las que tropezó, pero fueron la minoría.
Como dije previamente, mucha de la comedia viene de las interacciones entre Eddie y Venom, lo cual es bueno ya que también cumple un propósito de desarrollar estos personajes, incluso si es un poco raro.
Claramente, Venom 2 es un filme divisivo, ya se representa con su rating de 59% en Rotten Tomatoes. Definitivamente no es la dirección que esperamos con la idea de películas solitarias de este personaje.
Pero si la recepción indica algo, es que parece haber una mayor aceptación y acomodamiento esta vez. Esto se debe a que ya tuvimos una peli para exhibir esto. Ciertamente ayuda que Serkis y el resto del equipo tenían una dirección y temática mucho más coherente a seguir comparado con la primera.
Mientras que disfruté la original Venom, como película no era buena que digamos y tenía fallos muy notables. No diré que Let There Be Carange no los tiene, porque definitivamente es el caso, incluyendo algunos hoyos argumentales que no he mencionado. Sin embargo, el hecho de que no se tome muy en serio, su desarrollo sólido de protagonistas, acción entretenida y actuaciones muy buenas, ayudan a que esta obra no solo sea entretenida, sino también decente como película en sí.
No es para nada una mirada necesaria. Hay bastantes personas que no le gustaron y es perfectamente entendible, no es remotamente similar a películas del UCM o incluso el DCEU. Más se parece a las películas de superhéroes encontradas en los 2000. Pero en cierta manera eso la vuelve más especial hoy. Si les interesa y disfrutaron la original (o al menos la dinámica entre Brock y Venom) puedo recomendarla, solo no esperen una gran película. Apunta a ser un filme entretenido que cumple su papel, y en ese sentido, lo logra.
