Nazareno Barragán es un oficial que cumplía servicio hace 1 año como titular de la comisaría 9na. de Lomas de Millón, La Matanza. Al acusado, lo detuvieron esta semana. Quedó imputado por secuestros extorsivos ya que le habría pedido dinero a 2 prisioneros para salir de la comisaria en Ramos Mejía.
Fuentes policiales explicaron que todo comenzó el miércoles pasado, cuando detuvieron a dos hombres en la calle con cigarrillos de marihuana. Y luego, trasladados a la comisaría de Lomas de Millón. El procedimiento que incluso quedó escrito en un acta policial, no fue comunicado a ninguna autoridad judicial.
Los apresados comenzaron a enviar mensajes via Whatssapp a sus conocidos para realizar una colecta de dinero para el rescate. Uno de los amigos de los detenidos fue a la comisaría de Ramos Mejía para denunciar que sufieron un secuestro.
Alrededor de las 22 de miércoles, tras siete horas detenidos y sin pagar, los dos hombres pudieron irse de la comisaría libres. Las victimas desmintieron la idea de que los policás hayan sido delincuentes disfrazados. Afirmaron que era el subcomisario, con 20 años de trayectoria, quien les exigía dinero.
Luego llegó al lugar del hecho de La brigada del Departamento Investigación de Secuestros Extorsivos de la Policía Federal (PFA) y personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) y del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) de La Matanza. Quienes realizaron un allanamiento en la dependencia policial. El Juzgado Federal 3 de Morón, ordenó el operativo. La causa, instruida por el fiscal federal 1 de ese distrito, Sebastián Basso, se inició como secuestro extorsivo.
“Los teléfonos de las víctimas, con los que se había comunicado con sus amigos para que juntaran el dinero exigido, desaparecieron”, sostuvo un investigador del caso.
El procedimiento culminó anoche con el jefe policial detenido por los delitos de “exacciones ilegales y secuestro extorsivo agravado”. El fiscal además secuestró actas, los libros de guardia y otros documentos para ver quién más pudo haber estado involucrado en la maniobra delictiva. “Creemos que el subcomisario no actuó solo, podría haber más personal policial detenido en las próximas horas”, confió uno de los investigadores.
El subcomisario Barragán quedó detenido en la sede del Departamento Antisecuestros de la PFA, en el barrio de Palermo. Luego, la justicia lo traslado a Morón, donde el fiscal Basso lo indago. El acusado se negó a declarar y continuará detenido hasta por lo menos la semana que viene cuando se resolverá la situación procesal.
Crimen de kiosquero de Ramos Mejía: Un fiscal pidió llevar a juicio al detenido
